![](https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgzc0AoTkyWl6pwNshyH6tk4srtGuSBc_3U8rwCIrpDKoO9lNajMrsxvbMINKGKdtfYCVACIEqkL8azFpHgpDEdjIlb842Ladk_kC-wWyTdc6hU5NnW0BnlKxC9A70T7qpvlJdB8lExFXW-/s200/6044.jpg)
-¡Espera!- le interrumpe el filósofo-. ¿Hiciste pasar por las tres rejas lo que vas a contarme?.
-¿Las tres rejas?- preguntó el discípulo.
-Sí. La primera es la verdad. ¿Estás seguro de que lo que quieres decirme es absolutamente cierto?.
-No. Lo oí comentar a unos vecinos.
-Al menos lo habrás hecho pasar por la segunda reja, que es la bondad. Eso que deseas decirme, ¿es bueno para alguien?.
-No, en realidad no. Al contrario.
-¡Ah, vaya!. La última reja es la necesidad. ¿Es necesario hacerme saber eso que tanto te inquieta?.
-A decir verdad, no.
-Entonces- dijo el sabio sonriendo-, si no es verdad, ni bueno, ni necesario, sepultémoslo en el olvido.
Regálame la salud de un cuento (J.C. Bermejo)
No hay comentarios:
Publicar un comentario